Basquet Altea

Básquet Altea Imed Hospitales 90 - Teixereta 51

  Contundente derrota del colista Teixereta ante un Altea que ronrroneó hasta el descanso, 35-32. Una vez jugamos como se le presupone al segundo clasificado de la liga regular, el parcial del tercer cuarto 28-8, mas acorde con nuestro juego y posicioón en la tabla.

Anotadores: Luís 4, Nick 19, Marc 23, Viktor 6, Andrii 9, Alex 23 Gali 3, Gabriel 1, Domingo 2 y Toño.

Descanso de Semana Santa; volvemos el 22 de Abril contra Onil. Este partido hay que ganarlo si o si para consolidar la segunda posición y acceder a la fase de ascenso a categoría nacional.

¡VAMOS ALTEA!

BASQUET ALTEA 61 - NOU BASQUET ALCOY 66

Merecida derrota...

Último partido de la temporada en casa. Enfrente, Alcoy, tercer clasificado, buen equipo con jugadores de calidad y bien dirigido. En la ida, sufrimos mucho para poder doblegarles. En Altea, se presentan con una baja importante (uno de sus dos interiores). Nosotros llegamos al encuentro con una mala semana de entrenos, unido a 3 bajas, que quien sabe, nos pudo pasar factura.

Eran primordiales dos cosas de antemano: primero, pasar sus constantes 2x1 a toda pista con pases e inversiones rápidas de balón y, segundo, aumentar y mucho nuestra intensidad defensiva para desgastar a su buen base. El primer objetivo, funcionó casi a la perfección, ya que los alcoyanos prácticamente no lograron robar ningún balón. Pero lo segundo, fue una de las claves para la derrota, ya que cometimos muchísimos fallos en nuestras rotaciones en la presión y, aún peor, en nuestro balance defensivo posterior.

Con todo esto, el primer cuarto lo ganamos 18 a 15, fruto de jugar dentro con ventajas claras para nuestro pivot y movilidad de nuestros aleros cuando no tenían la pelota. Pero llega un mal segundo parcial, donde cometemos errores importantes en defensa, que nos castigan una y otra vez con canastas. Nosotros realizamos clamorosos fallos y perdonamos muchos puntos a nuestro rival. Al descanso 34 a 39.

En la segunda parte, se conciencia al equipo para mejorar nuestra concentración defensiva y efectividad de cara al aro contrario. Pero las sensaciones no eran buenas y seguimos con errores ciertamente infantiles que, como no, Alcoy nos castiga con canastas o faltas. Esto hace que nuestros dos interiores se carguen de faltas, condicionando sus acciones de juego. Entramos al último cuarto 48 a 52 y para proteger a los pivots, metemos una zona 3-2 con ajustes. Los visitantes la atacan con paciencia y consiguen ventajas dentro de la pintura, donde sus dos interiores se buscan a la perfección. En ataque, fallamos cosas muy claras, dándole vida a nuestro rival. Llegamos a los dos últimos minutos con 61 a 60. En este intervalo de tiempo fue una suma de malas decisiones, fallos en situaciones de ventaja y también no nos acompañaron un par de decisiones arbitrales que hubieran permitido llegar casi empatados al final del encuentro. Derrota por 61 a 66.

Tras el parón de Semana Santa, acabaremos la temporada, rindiendo visita al C.B.Unión de Alicante, donde esperamos finalizar la competición con buen sabor de boca. Sábado 22 a las 18:00 horas.

Parciales: 18/15, 16/24, 14/13 y 13/14.

C.B. PEGO 51 - BASQUET ALTEA 45

 Un último cuarto para olvidar...

  Sensación agridulce en la derrota frente a Pego. Partido aplazado a la tarde-noche del martes. De nuevo nos presentamos con 6 cadetes, más la ayuda del infantil Richard. Otra vez el cansancio pasó factura y no nos permitió llegar al final del partido con la frescura mental y física para poder competirlo con garantías.

  Con todo ello, planteamos una caja +1 a su mejor jugador (nº4), defensa que mantendríamos todo el partido. Esto permite que los locales tengan dificultades para elaborar su ataque en estático. En ataque, funcionamos muy bien, con nuestros movimientos y haciendo daño dentro de la pintura. El único problema que nos estábamos encontrando era el balance defensivo. Pego nos hizo mucho daño, ya que no hicimos buenos balances. Al descanso 28 a 26.

  Había partido. Los jugadores estaban haciendo las cosas bastante bien. Se habla en el descanso de estar más atentos a su contraataque. Dicho y eso. Pego no puede correr, por lo que le cuesta un mundo anotar frente a nuestra caja. En ataque, tenemos el problema de que los locales, también apuestan por cambiar su defensa a caja +1 a nuestro base. No nos descomponemos, y nuestros aleros consiguen entradas a canastas en ventaja que las anotaban. Hacemos el mejor parcial del encuentro y llegamos al último cuarto con un esperanzador 34 a 40. Y hasta aquí de nuevo llegaron las ideas, la gasolina y la concentración. Estamos 7 minutos sin anotar, con malas selecciones de tiro, nula aportación de nuestro pívot (desapareció por completo) y, de nuevo, nos corren contraataques con canastas fáciles. Había llegado el bajón físico y mental. Se para el partido con hasta 3 tiempos muertos (min. 2, 5 y 9), pero era imposible revertir la situación. Derrota por 51 a 45.

  Con mucha frustración tocaba regresar a Altea, ya que el partido estaba bastante encarrilado y perdimos una oportunidad de oro de haber salido de la última posición en la clasificación.

  Parciales: 16/15, 12/11, 6/14 y 17/5.

ONDARA 34 - BASQUET ALTEA 36

 Victoria para la historia...

  Si hay una fecha que el equipo cadete podrá recordar como histórica, esa será el 8 de abril de 2017. Día, donde pudimos derrotar al líder del grupo y en su casa. Si a esto, le sumamos, que ellos se jugaban el play-off, que eran 12 jugadores, frente a 5 (más Joan Asensi que hizo lo que pudo) nuestros, la partida se presentaba realmente complicada.

  Pero los partidos hay que jugarlos, y esta vez salió cara. Volvemos a plantear una caja +1, siempre frente a sus mejores jugadores tiradores de 3, ya que Ondara es un equipo que plantea su juego bajo 3 premisas: presión a toda pista, contraataque y mucho lanzamiento exterior. En lo que respecta a nosotros, fuimos anotando punto a punto y defendiendo nuestra zona con uñas y dientes. Los locales, sencillamente no tuvieron el día con el lanzamiento de 3, y su nivel de ansiedad fue poco a poco a más.

  El primer cuarto ganan 11 a 8, con dos triples finales. Pero las sensaciones eran buenas. Jugadores tranquilos, buenos pases, inversiones de balón y juego con Vicent dentro, donde una vez más tenía mucha ventaja. El segundo cuarto, los locales se quedan en tan solo 3 puntos (1 triple). No anotan nada dentro de la pintura. Estábamos relativamente bien ordenados en esta zona del campo. En ataque, Ondara no nos concede ninguna ventaja, nos cortaban con falta muchas acciones, pero fallamos los tiros libres. Al descanso un increíble empate a 14.

  El tempo del partido era nuestro. Lo sabíamos. Los locales estaban nerviosos, precipitados y con cierto nivel de ansiedad. En la reanudación se apela a lo mismo. Concentración en la salida de presión y calma en nuestro ataque. Hacemos bien lo que hablamos. Esto, apenas permite a los de Ondara correr contraataques y todo es ataque estático, donde no están acertados. Entramos al último cuarto 24 a 27. Los jugadores estaban con un plus de motivación. De nuevo, llegábamos al tramo final de un partido con opciones de victoria. Los locales están imprecisos con 0/6 en tiros libres. Nosotros anotamos a cuentagotas, ya que nos estaban presionando cada vez más duro y más arriba. Llegamos al minuto 4 con 24 a 31. Tiempo muerto local. Aumentan aún más su presión. Cada vez había más manos, más contactos y menos espacios para jugar. Nosotros estamos tranquilos, pivotamos, no saltamos en los pases y apenas nos roban un par de balones en el tramo final. Los jugadores estaban exhaustos, no se movían apenas y era difícil pasar la pelota.  A falta de 1 minuto y medio, casi sin creerlo llegamos 30 a 35. LLegan momentos de muchos nervios por ambas partes. Todo lo que ocurre se decide desde la línea de personal, no se concede absolutamente nada. En este tramo, Ondara gana los tiros libres por 4 a 1, pero son insuficientes y apoteósica e increíble victoria, provocando las lágrimas en un equipo y el éxtasis en el otro. Marcador 34 a 36.

  Esto nos ha permitido acabar la temporada de la mejor manera posible, tras una larga travesía por el desierto. Felicitar a los jugadores "implicados" en el equipo por creer y seguir ahí en todo momento. Tras 2 meses de derrotas, en el último suspiro, pudimos ganar y dejar el farolillo rojo. Sin duda, año difícil, sufrido y complicado que ha tocado a su fin. Solo espero que "todo el mundo" haya aprendido de esta experiencia, y sirva para mejorar en futuras temporadas. Un abrazo a toda la familia del Básquet Altea.

Diego Vilar García.

  Parciales: 11/8, 3/6, 10/13 y 10/9.